La Universidad de Yale no ha inventado una vacuna que se transmite por el aire
- Publicado el 24 de noviembre de 2023 a las 22:45
- 4 minutos de lectura
- Por Tommy WANG, Katharina ZWINS, AFP Hong Kong, AFP Austria, AFP Colombia
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“Nuevo ‘air vax’ lleva ARNm directo a los pulmones, lo que plantea serias preocupaciones bioéticas” e “Investigadores de la Universidad de Yale han desarrollado un nuevo método aéreo para llevar ARNm directamente a los pulmones”, señalan entradas en Facebook (1, 2) y X (1, 2), antes Twitter.
Publicaciones similares circulan en inglés y francés.
Algunos usuarios enlazan un artículo del blog Alerta Digital publicado el 5 de octubre de 2023 y titulado “Nuevo ‘air vax’ lleva ARNm directo a los pulmones, lo que plantea serias preocupaciones bioéticas”.
El artículo es una traducción de otra nota en inglés del sitio web Slay News, titulado “Científicos desarrollan ‘ARNm aerotransportado’ para vacunar al público sin consentimiento”.
La página remite a su vez a un extracto de The Epoch Times, un sitio web que anteriormente ha difundido desinformación sobre la vacunación y la pandemia del covid-19, en el que también afirma que los investigadores de Yale han logrado desarrollar "un nuevo método de administración aérea de vacunas de ARN mensajero".
El estudio mencionado en los artículos fue publicado el 16 de agosto de 2023 en la plataforma PubMed, un motor de búsqueda en línea de estudios científicos médicos gestionado por los Institutos Nacionales de Salud (NIH) de Estados Unidos. El artículo se titula en inglés: “Nanopartículas poliméricas transportan ARNm al pulmón para la vacunación de mucosas”.
Sin embargo, el estudio no menciona la creación de una nueva forma de vacuna de transmisión aérea ni la vacunación a distancia.
Algunos de los autores del estudio, así como varios virólogos, dijeron a la AFP que tal método no existe y no funcionaría.
Vacunación nasal
Contactada por la AFP, Hee-Won Suh, una de las autoras del estudio e investigadora del Departamento de Microbiología e Inmunología de la Facultad de Medicina de Geisel, explicó el 3 de noviembre que la investigación en la que participó en realidad reveló que la administración de moléculas de ARN mensajero por vía intranasal podía vacunar eficazmente a los ratones contra el virus del covid-19.
Las vacunas nasales actúan en el organismo de la misma forma que un virus, ayudando a reforzar la inmunidad de la membrana mucosa que recubre la nariz y la boca, evitando así que las personas se infecten y contribuyendo a frenar la propagación de la enfermedad.
Sin embargo, el estudio en cuestión “no implicaba a seres humanos”, y “una técnica aerotransportada no funcionaría en humanos”, dijo Hee-Won Suh.
Para que una vacuna sea eficaz, “los seres humanos deben recibir una dosis controlada administrada directamente en la nariz”, añadió.
Uno de los otros autores del estudio, W. Mark Saltzman, profesor de la Facultad de Medicina de Yale, declaró a la AFP que las dosis de vacuna administradas deben estar bien ajustadas para que sean eficaces. Esto sería “imposible” en el caso de la administración por vía aérea.
Consultados por la AFP, otros virólogos sin relación al estudio afirmaron también que no es posible vacunar a las personas sin que lo sepan, utilizando un método aerotransportado.
Para Dorothee von Laer, profesora del Instituto de Virología de la Universidad Médica de Innsbruck, en Austria, estas afirmaciones “no son más que teorías conspirativas”.
“Dado el estado actual de la investigación, es inconcebible que una concentración suficiente de vacuna pueda alojarse en la mucosa nasal o en los pulmones administrando la vacuna en forma de aerosol en el aire”, explicó von Laer.
Por su parte, el Instituto Federal de Vacunas y Biomedicinas de Alemania, el Paul-Ehrlich-Institut, declaró a la AFP el 2 de noviembre que “es inconcebible que se pueda vacunar correctamente a las personas sin que se den cuenta, ya sea a través del aire o de cualquier otra forma”.
¿Cómo funciona el ARN mensajero?
El ARN mensajero está presente en todas las células y les permite trabajar para garantizar el buen funcionamiento del organismo. Actúa como intermediario entre el código genético del ADN y la actividad de la célula para que fabrique proteínas.
Más concretamente, es una copia temporal de una pequeña parte del ADN presente de forma permanente en el núcleo de la célula. La célula utiliza esta copia como código para producir proteínas específicas.
En un tratamiento con ARN mensajero, estos fragmentos de código genético se insertan desde el exterior. Por lo tanto, son creados artificialmente en el laboratorio y no a partir del ADN.
Esto lleva a las células a reproducir proteínas presentes en el virus [antígenos] para acostumbrar al sistema inmunitario a reconocerlo y neutralizarlo.
Una vacuna convencional pretende acostumbrar al organismo a un virus u otros agentes infecciosos, pero lo hace introduciéndolo directamente al cuerpo de forma atenuada o desactivada. Algunas vacunas más recientes sólo inyectan los antígenos del virus.
La revolución de las vacunas de ARN mensajero es que hacen que las células trabajen directamente para producir estos antígenos. Como ocurre con otras vacunas, el sistema inmunitario reacciona posteriormente, en particular generando anticuerpos.
AFP Factual ha verificado otras desinformaciones relacionadas con vacunas.
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