Las estelas de aviones se ven más en cielo despejado, pero también se producen con nubes bajas

  • Este artículo data de hace más de un año.
  • Publicado el 11 de mayo de 2023 a las 17:27
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  • Por Natalia SANGUINO, AFP España
Las estelas de condensación de los aviones se ven bien con cielos despejados, lo que no quiere decir que no existan cuando hay nubes. Tampoco demuestran una manipulación artificial del tiempo para provocar sequía, como pretende mostrar una comparación de fotografías —una de nubes, asociada a la lluvia, y otra con estelas, asociada a la sequía que sufren países como España— , que ha sido compartida más de 1.600 veces en redes sociales desde abril de 2023. Las emisiones de los aviones pueden afectar al clima, pero no tienen capacidad para agravar la sequía, de acuerdo con expertos.

“Agenda 2030”, comienza esta publicación en Facebook, que añade: “Buscan incrementar artificialmente la sequía para cargarse la agricultura y la ganadería en nuestro país (...) con los aviones que fumigan nuestros cielos”, acompañando el texto con la comparación de un cielo con nubes y otro cruzado por estelas de condensación como las que dejan los aviones. “Claro clarísimo #Geoingenería”, considera este usuario, que comparte la misma imagen, que también circula en Instagram y en TikTok.

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Captura de pantalla de una publicación en Facebook, realizada el 10 de mayo de 2023

La narrativa desinformativa sobre las estelas que dejan los aviones existe desde hace años, aunque se ha incrementado con las consecuencias visibles del cambio climático. Este artículo de 2011 ya hablaba de la confusión provocada por el término “chemtrails”, un concepto sobre el que hay muchos grupos en Facebook, como “Chemtrails españa”, donde también fue publicada la fotografía viral.

“Los chemtrails no existen, zanjó César Paradinas Blázquez, meteorólogo de la Fundación para la Investigación del Clima (FIC), el 9 de mayo de 2023, y advirtió: “Lo correcto sería ‘contrail’, del inglés, o ‘estela de condensación’ en castellano”.

“Esas estelas se forman por lo que suelta el avión (vapor y partículas de la combustión), que favorecen la aparición de esos cristales de hielo que vemos como estelas”, explicó a AFP Factual en la misma fecha Enrique Sánchez, decano en la Facultad de Ciencias Ambientales y Bioquímica de la Universidad de Castilla-La Mancha.

La sequía no se puede provocar artificialmente

La sequía es un fenómeno natural que se ve agravado por la acción humana y el cambio climático y afecta a países como España, donde las precipitaciones acumuladas desde el 1 de octubre de 2022 han sido un 25% inferiores a lo habitual en el país, a lo que se sumó una muy temprana ola de temperaturas extremas, con valores similares a los que se suelen registrar en meses estivales.

La falta de lluvia y las olas de calor tempranas, que los expertos atribuyen al cambio climático, ya provocan desplazados climáticos e incendios forestales en países como Irak o Canadá.

Las estelas, visibles con estabilidad atmosférica

Sánchez apuntó que las imágenes virales, presentadas “sin [el] contexto” en que fueron tomadas, “tienen valor cero científicamente”. “Las teorías conspiranoicas sobre geoingeniería [la posibilidad de manipular artificialmente el tiempo] existen desde hace mucho tiempo y ninguna de ellas se ha confirmado ni demostrado”, dijo a AFP Factual en octubre de 2022.

Esas estelas de condensación “son visibles en situaciones de estabilidad atmosférica, que es cuando no llueve”, pero “se propagan en la alta atmósfera y no tienen ningún impacto en la superficie”, contó a la AFP Paradinas, junto a su compañero en la FIC Darío Redolat, con ocasión de otra verificación en abril de 2023.

Paradinas señaló el 9 de mayo:

En esas circunstancias, “de los motores [de los aviones] sale la humedad justa para generar estelas y se forman esos cielos con trozos blancos rectilíneos”. “Eso no quiere decir que sea lo habitual, simplemente que con otro tipo de cielos no son tan fáciles de identificar o no se ven”, añadió Paradinas.

“Las nubes están en varias alturas”, apuntó de su lado Enrique Sánchez, “esas estelas [como las de la foto viral] son a la altura que vuelan los aviones, en torno a 10 kilómetros, donde están congeladas” y que, cuando no salen de los aviones sino que se forman de manera natural, llamamos cirros. “Son el resultado de una combinación de condiciones de temperatura/humedad concretas en esa zona, que es diferente de las que hay más abajo, donde están las nubes de agua”, como pueden ser los cúmulos o los estratos, por ejemplo. Con presencia de estas últimas, las estelas “no se verían desde el suelo”.

Los cirros que se forman en esa capa elevada lo hacen de manera “más amplia, porque la humedad y las partículas responsables de crearlos tienen un origen más disperso”, mientras que un avión “es una fuente de los elementos de creación de cristales muy concreta y puntual”, en palabras de Sánchez. Además, según Paradinas, cuando las capas altas de la atmósfera son húmedas y hay presencia de cirros, “es más fácil que los aviones generen estelas de condensación que perduren muchas horas y se integren con el resto de las nubes”.

“Los cirros o las estelas de condensación nunca generan lluvia, tienen demasiada poca humedad, la lluvia aparece por otro tipo de nubes”, comentó Sánchez.

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Nubes de tormenta sobre Puertito del Buceo, en Montevideo el 26 de agosto de 2020 ( AFP / Mariana Suárez)

Volviendo a la imagen viral, Paradinas indicó que la foto de la izquierda “corresponde a lo que se denominan ‘cúmulos de buen tiempo’, que son nubes que se generan los días de primavera, pero que por la estabilidad en altura nunca llegan a dar lluvia”.

La mención al BOE

En alguna de las publicaciones virales, como esta, se añade la frase “modificación de la fase atmosférica” y se menciona el “artículo 3” del Boletín Oficial del Estado español (BOE) en 1986. AFP Factual encontró este epígrafe de la ley sobre el dominio público hidráulico, que establece cómo actuar en caso de pretender modificar “la fase atmosférica del ciclo hidrológico”.

Sobre ese epígrafe, el decano Sánchez aclaró: “Desde hace décadas se estudia cómo intentar reducir, a pequeñísima escala, el granizo (...) en momentos muy puntuales y con éxito casi nulo”. “La frase del BOE es genérica. La ciencia dice que eso no funciona”, expuso Sánchez, quien se refirió a un reciente artículo de la Agencia Estatal de la Meteorología (Aemet) sobre modificación artificial del tiempo. La publicación de este texto divulgativo provocó también desinformación, que AFP Factual verificó aquí.

Las estelas sí afectan al clima

La ciencia no ha logrado la manipulación del tiempo a voluntad para que llueva ni para provocar la sequía. “Todos los experimentos que se han intentado hacer para la manipulación del tiempo”, señalaron Paradinas y Redolat en abril pasado, “han ido enfocados a aumentar la cantidad de precipitación, o en su defecto a reducir los daños que esta pueda provocar, como el granizo”. “Nunca se ha hecho ningún tipo de experimento para provocar sequías”, aclararon, “ya que eso va en contra de toda la lógica humana”.

Como también comentaron Paradinas y Redolat a la AFP entonces, “las estelas en sí pueden afectar al clima” al ser nubes y, además, en su conjunto “favorecen el calentamiento global”, pero en menor medida que otras fuentes de emisiones. “Podríamos decir que las emisiones procedentes de los combustibles fósiles son un modo en sí mismo de manipular el clima a largo plazo, pero considerando aviones, barcos y el conjunto del transporte por carretera, no solo los primeros”, ampliaron los científicos, que concluyeron:

Referencias

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