Varios países solicitan el nombre de los ciudadanos en los censos, no solo Bolivia

“El único censo del mundo donde piden nombre y apellido”, dice el comunicador boliviano Carlos Valverde en un video compartido en TikTok, Facebook (1, 2, 3) y X (1, 2). “¿Para qué? Si lo que quieren saber es cuántos somos, no quiénes somos. Para eso está el registro civil”, añade.

La secuencia fue extraída del programa “Sin Compostura”, emitido en el canal de Valverde en YouTube el 19 de marzo último. Allí también participó la periodista Amalia Pando, quien aseguró que el censo de Bolivia es en realidad un “empadronamiento” que busca “los datos más íntimos” de las familias. 

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Captura de pantalla de una publicación en TikTok, realizada el 27 de marzo de 2024

El 23 de marzo se realizó el Censo de Población y Vivienda en Bolivia, con el objetivo técnico de “proporcionar datos estadísticos actualizados sobre las características demográficas, sociales, económicas de la población del país y sobre las características de las viviendas y acceso a los servicios públicos”.

El censo solicitó, en efecto, el nombre y apellido de las personas que habían pasado la noche en la vivienda censada.

Una práctica recurrente

El primer censo boliviano se realizó en 1831 “habiéndose iniciado desde entonces una marcada tendencia a conocer la composición de la población del país”.

En la página web del Instituto Nacional de Estadística (INE), se pueden revisar los cuestionarios censales de los años 1950, 1976, 1992, 2001, 2012 y en todos se solicitó el nombre y/o apellido de las personas que durmieron en la vivienda la noche anterior.

Dunia Sandoval, docente de la Universidad Católica Boliviana de la Sede Santa Cruz, confirmó a AFP Factual que en los censos nacionales “se pide el nombre de las personas”, y aquello “sirve como información para el/la persona que censa”, es decir, para no confundir los nombres de los integrantes del hogar. “Es de referencia”, aseguró.

Así lo confirmó también Álvaro Chirino, estadístico y director Ejecutivo de la Fundación ARU, quien detalló que solicitar el nombre “facilita llevar a cabo la entrevista en hogares de dos o más miembros”. Detalló asimismo que el uso de los nombres propios en el censo es meramente nominal, ya que las personas censadas podrían optar por dar un seudónimo o solo su primer nombre.

“Es normal pedir nombre y apellido, y a veces solo el nombre, tanto en censos como en encuestas. Por ejemplo, en sus últimos censos, Chile (2017), Perú (2017) y Colombia (2018) preguntaron por nombre y apellido”, añadió. 

El 20 de marzo en una conferencia de prensa, Iván Márquez, jefe Nacional de Temática del INE, recordó que desde el año 1900, en todos los censos del país, se ha solicitado el nombre a los entrevistados.

“Si revisamos los censos desde 1900, se ha pedido nombres y apellidos (…) y se ha mantenido el secreto estadístico y la confidencialidad. Como cualquier oficina de estadística, esto lo hacemos cumplir”, dijo.

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Una voluntaria rellena un formulario durante el Censo de Población y Vivienda en Laja, Bolivia, el 23 de marzo de 2024 (AFP / AIZAR RALDES)

En la página web de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) se encuentran formularios censales de 20 Estados miembros. Al revisarlas, la AFP corroboró que todas solicitaban por lo menos el nombre y la mayoría el nombre y el apellido de los integrantes del hogar (1, 2, 3).

Esta consulta también es habitual en Europa. En el censo de Francia de 2024 se solicitó nombre y apellido, al igual que en España y en Grecia en 2011. 

Lo mismo cuenta para Estados Unidos. El gobierno explica que se pide el nombre de las personas censadas porque “es más fácil para un encuestado hacer un seguimiento de la persona por la que está respondiendo si se utilizan los nombres”, y también por razones administrativas.

En el video viral, Valverde cuestiona además otros elementos a completar en el censo, como el nombre de familiares en el extranjero, y el nombre de las personas fallecidas que hayan vivido en el hogar, y fecha del deceso. El periodista asegura que él no responderá a estas preguntas e invita a los oyentes a no hacerlo para evitar el “empadronamiento”.

Sin embargo, otros países también han solicitado ese tipo de datos, como Colombia en 2018, Paraguay en 2012 y República Dominicana en 2010.

El INE no aplica sanciones a las personas que no responden el censo, tal como confirmó su director Humberto Arandia en una conferencia de prensa el 16 de marzo. “Esa multa no existe”, dijo, ante los rumores que circularon acerca de la supuesta penalidad.

Referencias

• Formulario censal de Francia 2024
• Formulario censal de Brasil 2022
• Formulario censal de Colombia 2018
• Formulario censal de Paraguay 2012
• Formulario censal de Grecia 2011