Alberto Fernández fue sorteado por la Justicia para ser defensor de un socio del clan Puccio en 1988

Después de haber circulado durante la campaña presidencial en 2019, la foto, en blanco y negro, volvió a viralizarse en 2020 a modo de meme en Facebook, donde fue compartida más de 3.800 veces. “Se acuerdan del clan Puccio, secuestraban y asesinaban por MONEY? [sic] Miren quien era el abogado defensor??? El nefasto presidente Alberto Fernández!!!”, se lee en un texto incluido en la imagen, que además reza: “Vengo a contarles que… Alberto Fernández fue abogado del clan Puccio. El no quiere que se sepa. Por eso lo publicamos”.

La imagen también circula en Twitter.

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Captura de pantalla realizada el 11 de noviembre de 2020 de una publicación en Facebook

El meme comenzó a circular en 2019, en plena campaña para las elecciones que llevaron a Alberto Fernández a la Presidencia, y fue verificado en su momento por Reverso, el proyecto colaborativo de lucha contra la desinformación coordinado por la AFP y Chequeado, junto a empresas de tecnología y en el que participaron un centenar de medios argentinos. 

El clan Puccio estuvo integrado por miembros de una familia de San Isidro (al norte de la capital argentina), que entre 1982 y 1985 asesinó a, por lo menos, tres personas, según pudo probar la Justicia: Ricardo Manoukian, Eduardo Aulet y Emilio Naum. Una cuarta víctima, Nélida Bollini de Prado, estaba secuestrada en un sótano cuando la policía detuvo a los miembros de la banda.

El clan no estaba conformado solamente por los padres e hijos Puccio. Además de Arquímedes Puccio (el padre de la familia), los hijos Alejandro, Daniel, Guillermo, Silvia y Adriana, y Epifanía Calvo (la madre), también lo integraban el militar retirado Rodolfo Franco y sus amigos Guillermo Fernández Laborde y Roberto Oscar Díaz.

Defensor por sorteo

Consultado por Reverso en 2019, Fernández explicó que en la década de 1980 se desempeñó como “conjuez del Juzgado Federal de San Isidro que por entonces estaba a cargo de Alberto Piotti”.

Los conjueces son designados por un juez para que, en caso de que tenga un impedimento (por ejemplo, una enfermedad), puedan tomar su rol o el de fiscal o defensor, sin necesidad de suspender el juicio. Esto se encuentra legislado en el Código Procesal Penal de 1915 (página 255) que estaba vigente en la época y en la Ley 4.055.

También consultado por Reverso en 2019m el juez Piotti, a cargo de la causa del clan Puccio, contó: “Yo todos los años proponía diez abogados que pudieran actuar como subrogantes [que lo pudieran reemplazar en su obligación], que fueran de mi confianza. Cuando fue la causa de Puccio se necesitaba la asistencia de un defensor oficial porque [los imputados] no proponían abogado. Entonces se sorteaban de los diez conjueces a qué le tocaba cada uno”. Y agregó: “A Alberto Fernández le tocó ser defensor de Fernández Laborde”.

En la foto viralizada aparece el imputado esposado delante de Alberto Fernández, quien era su defensor oficial en ese momento, y a un lado el entonces juez Piotti.

Reverso lo confirmó con los diarios de la época: la imagen de ese momento fue publicada el 24 de febrero de 1988 en el diario Página 12 en una nota sobre el juicio.

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Fotografía tomada por Reverso de la edición del 24 de febrero de 1988 de Página 12

La foto fue tomada durante un reconocimiento en el que Fernández Laborde indicó dónde arrojaron la máquina de escribir con la que enviaban los mensajes intimidatorios a los familiares de los secuestrados.

“La foto es auténtica, es de febrero de 1988. Me acuerdo que llovía. La tapa del diario Clarín de ese día es una foto de la máquina de escribir”, recordó el exjuez Piotti.

“El fiscal que intervenía se excusó en la causa Puccio en virtud de su amistad con el hijo rugbier. Ante eso, el defensor oficial ocupó el rol del fiscal. Fernández Laborde, un militar involucrado en los secuestros seguidos de muerte que se investigaban, no había designado abogado defensor y como el defensor oficial estaba actuando como fiscal en la causa, debieron sortear entre los conjueces a un defensor de oficio. Así me hice cargo de esa defensa por un tiempo muy exiguo, hasta que el acusado nombró a un defensor particular”, explicó Alberto Fernández a Reverso.

Los registros del diario La Nación de septiembre de 1985 indican que, en ese momento, pocas semanas antes de quedar detenido, el abogado defensor aún no era Alberto Fernández sino un hombre llamado Edgardo Sa (hijo).

En conclusión, la foto viralizada en redes sociales es verdadera. En 1988, Alberto Fernández fue designado por sorteo como abogado defensor de Guillermo Fernández Laborde, miembro de la banda criminal denominada clan Puccio, y es quien aparece en la imagen, detrás del acusado. 

Esta verificación fue realizada por el proyecto colaborativo Reverso. Participaron periodistas de Chequeado y AFP.