No hay registro de un informe del FMI sobre créditos chinos perdidos en corrupción en Ecuador

"Un análisis del Fondo Monetario Internacional (FMI) determinó que al menos el 35% de los préstamos chinos se perdieron en corrupción, ineficiencia y sobreprecios", dice el fragmento de un texto difundido en Facebook (1, 2). 

Una frase similar se compartió en esa red y en Instagram. Además, solicitudes de verificación de esta información llegaron al WhatsApp y a la cuenta de Twitter de AFP Factual. 

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Captura de pantalla de tuits y mensajes de WhatsApp con solicitudes de verificación a AFP Factual, tomada el 10 de febrero de 2022

Una búsqueda del texto en Google permitió establecer que es un fragmento de una nota del diario ecuatoriano La Hora, publicada el 2 de febrero de 2022, un día antes de la visita oficial que Lasso realizó a China entre el 3 y el 5 de febrero de 2022.

En el artículo se listan nueve "claves" de la deuda que Ecuador mantiene con China, que bordea los 5.000 millones de dólares, según el Ministerio de Economía y Finanzas. 

Uno de los objetivos de la visita de Lasso al país asiático fue renegociar plazos de pago más favorables en esos créditos y desvincular la entrega de barriles de petróleo. El país asiático pasó a ser el principal financista de Quito durante el gobierno del exmandatario Rafael Correa (2007-2017). 

Sin embargo, no hay registro de un reporte del FMI en el que se indique que el 35% de los préstamos chinos a Ecuador se ha "perdido" en corrupción, ineficiencia o sobreprecios. 

Una revisión de la página de noticias, informes y otros documentos relacionados con Ecuador en el sitio web del FMI no llevó a ninguna publicación que apuntara a la corrupción en el uso de los préstamos chinos.

"No hay ningún informe del FMI que contenga esta información", aseguró a AFP Factual María Candia, encargada de prensa del organismo internacional, el 3 de febrero de 2022.

Uno de los documentos encontrados, del 23 de diciembre de 2020, menciona los acuerdos petroleros de largo plazo que tiene Ecuador con otros países, entre ellos China, como parte de sus créditos financieros.

"Dichos contratos están actualmente en vigor con empresas financieras chinas. En estos acuerdos, los bancos chinos (ICBC, China Minsheng Bank, Export-Import Bank of China y CDB) otorgan préstamos al gobierno (Ministerio de Economía y Finanzas) que son reembolsados con fondos gubernamentales, y paralelamente Petroecuador se compromete a embarcar ciertos barriles de crudo a Petrochina", dice el informe en la página 52. 

Pero no hace ninguna alusión a corrupción en el uso de los préstamos.

Al respecto, el economista ecuatoriano José Hidalgo, director de la Corporación de Estudios para el Desarrollo (Cordes), dijo a la AFP: "No creo que esta afirmación haya salido en un informe del FMI, pues este no acostumbra a hacer este tipo de señalamientos".

En ello coincidió el economista Jhon Cajas Guijarro, docente de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Central del Ecuador, quien comentó a la AFP: "He escuchado esa versión desde la discusión política, pero nunca he visto algún documento oficial del Fondo que respalde esa afirmación".

También descartó tal posibilidad en declaraciones a la AFP Jorge Calderón Salazar, economista y rector del Instituto Superior Universitario ARGOS: "Sobre el uso de los préstamos chinos se han hecho denuncias internas en Ecuador, no de parte del FMI, que no suele hacer este tipo de señalamientos puntuales a empresas, gobiernos o países. El Fondo se cuida mucho de hacer este tipo de acusaciones y suele esperar que los países actúen con sus propios medios en temas de corrupción". 

Denuncias en Ecuador

Calderón mencionó que dichos cuestionamientos están vinculados a los préstamos pactados con China durante el gobierno de Correa. De acuerdo con el especialista, "la deuda fue relativamente cara en el sentido de plazos cortos y altas tasas de interés, en comparación con las condiciones de otros organismos financieros".

Y añadió: "Sí hay casos de obras hechas con esos recursos que se han ido en sobreprecios, como la hidroeléctrica Coca Codo Sinclair, que costó más de lo presupuestado y no está en plena capacidad de uso por fisuras y fallas de construcción".

La Contraloría General del Estado concluyó en 2018 que existían más de 7.000 fisuras en zonas sensibles y fallas estructurales en la hidroeléctrica Coca Codo Sinclair, en la provincia de Napo, y que la constructora china a cargo de la obra "empleó materiales no homologados" y "no aplicó procedimientos técnicos" necesarios.

"Gran parte de los créditos contratados con los bancos chinos fueron destinados a obras de infraestructura con la condición de que el Ecuador contratara preferentemente con empresas chinas, tal como ha sucedido en otros países de la región", explicó Cajas.

Según Hidalgo, "hay una polémica en cuanto a la calidad de la construcción de esas obras. Y respecto a las condiciones: eran por lo general créditos con un interés en torno al 7% anual, bastante más alto que el que cobran los [organismos] multilaterales, y con plazos de pago relativamente cortos, más o menos en torno a siete años".

El analista aclaró que Ecuador acudió a China para recibir financiación porque "en esos años tenía cerrados los mercados internacionales por un riesgo país muy alto y porque también tenía una muy mala relación con los multilaterales, entonces no había muchas fuentes de financiamiento externo".